Los familiares de las personas dependientes, o con problemas de cognición, desean que estas estén en las mejores condiciones posibles. Y ello también depende de la asistencia a centros de día.
Son espacios de esparcimiento en los que los asistentes pueden desarrollar muchas actividades. Pero para que ello se dé en las mejores condiciones, las características de un centro de día han de validarlo para tal. Es necesario que, además de estar legalizado en todos y cada uno de los ámbitos, presente unas instalaciones no solo atractivas y cómodas, sino seguras.
Hay que recordar que los espacios dirigidos a ancianos y personas dependientes, tienen que tener una serie de características que los diferencie de otros lugares. Deben ser espacios libres de obstáculos, con corredores libres de muebles grandes, con asideros e instalaciones muy específicas. También entre las características que debe ostentar un buen centro de día, se halla la calidad del cuarto de baño.
El aseo e higiene diarios también son posibles en centros de día capacitados para ello… y con capacidad nos referimos a instalaciones apropiadas para evitar accidentes. Además de resultar seguras, las instalaciones de cuartos de baño y platos de ducha, deben ser cómodas y perfectamente accesibles. En cuanto a los platos, tendrán que ser antideslizantes.
En algunos casos, incluso en el interior del espacio de baño hay sillas en las que la persona pueden sentarse mientras se lava o es lavada por un asistente. Por otra parte, otra de las cualidades que ha de tener un buen centro de día, es la posibilidad de interactuación entre los asistentes. A pesar de que asisten persona con muy diferentes condiciones físicas y mentales, sí es cierto que hay que proporcionar espacios de encuentro; recordemos que relacionarse e intercambiar opiniones es muy favorable para mantener en buen estado los sentidos cognitivos.